domingo, 27 de junio de 2010

Perfectamente incorrecto.

Antes de cruzar el comedor, 
cierro los ojos y pido que no esté allí,
-no sabría que sentir, no sé si es correcto sentir-
pero no sabes cómo me alivia 
ver que está en la mesa de siempre...
como esperando por mi.

 

Yo creía que era especial, que encajaba en la lista perfecta, que cubría cada vacío.
Escuché cada una de sus palabras y las agrandé, las alabé, las hice explotar.
No quise entender que no hay nadie perfecto, pero que ahí está lo bello;
en querer cada defecto, en necesitar cada manía, en suplicarle un poquito de cortesía.
Porque a los modelos (a los prototipos), los conoces, te los sabes de memoria,
sabes cuál será su reacción, las palabras que va a utilizar
y si a eso le encuentras alguna gracia...
entonces aún no entiendes de estas cosas.

No lo busques donde no está, 
comienza por los lugares en dónde nunca crees que lo encontrarás
y bueno, si allí tampoco está quizá debas sentarte a esperar.

6 comentarios:

  1. Extraño el sabor de ese dulce amor
    que alimentaba nuestras vidas.

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  2. Bello texto, a mi me funciono el metodo de "sigue tu vida y cuando sea tiempo, el vendra a ti"
    Besos.

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  3. Sencillo pero precioso texto. Nunca se sabe como funcionará o cuándo aparecerá el amor...

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  4. Lindo ..lindo & muy cierto aquello de buscar donde menos lo esperes...eso funciono para mi :)
    Saludos

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  5. qUE BONITo!!! ME GUSTO TODO EL TEXTO...
    bESOs!!<3

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